de entender de que nos separan 200 años, que hemos hecho en todo este tiempo, que deberíamos hacer.
el continente comparte esta instancia colectiva: habrá que evaluar de que manera nos enfrentamos a la imposición cultural heredada, 200 años después.
en tiempos de memoria y verdad, una certeza: nunca hay posibilidad de reconciliación y pacificación, si la justicia no pone las cosas en su lugar. (brasil, ayer, en medio del esplendor de lula, reabre las causas de los crímenes del 64 al 85. alguien supone que afecte a la economía? pero si afecta al carácter de un pueblo)
solo a partir de eso será posible construir.
-la relación del continente con sus colonizadores (de los espejitos de colores a repsol, de la plata del potosí a los tableros contrachapados prodema, de los árboles a las papeleras sobre el río uruguay)
-la relación entre dominados, la salida colectiva de ese status: como pocas veces, el continente transita caminos de complementareidad ideológica y de oportunidad económica, como suministro de recursos global: mas de uno querrá sembrar cizaña adentro, para instalar escenarios: ya le pasó a los indios quilmes hace mucho, y las estrategias no han cambiado tanto.
-la relación puertas adentro, entre nosotros y el bicentenario como oportunidad de abandonar el enfrentamiento superfluo, y abordar las cuestiones de fondo.
los argumentos de peso son difíciles de rebatir: la pelea se dispara por intereses mezquinos o por temas menores: no hay predisposición a la discusión.
En ese contexto, el bicentenario se dirime entre la reflexión profunda que no se masifica, que no expande, y el golpe de efecto, entre sensiblero y pomposo, de obras remarcables aquí y allá.
Pareciera que es menester dejar una obra para el fin de fiesta, como la bolsita de regalos a la salida de los cumpleaños.
Nuestro país no ha anunciado obras en ese sentido: podría ser un buen indicador; pero no parece ser una decisión, mas bien una consecuencia de otras prioridades.
Sin embargo, sin necesidad de iconizar la ocasión, no estaría mal regalarnos, celebrarnos, independientes, nación que mira un nuevo período, algunas obras:
Hay algunas obras remarcables de cara la futuro, que son mucho mas significativas que las que parecen ser las elegidas:
La refacción del teatro colón, si bien es indispensable, se trata de arreglar una obra centenaria, desatendida por años. Volver a celebrar un centenario con una obra que ya los celebró, no parece ser un buen indicador.
Y hacer un mirador en puerto madero puede resultar simpático , pero sería mas interesante mirar mas en profundidad. Alan ya a hecho bastante allí.
El riachuelo sería una gran causa, porque obligaría a distintas juridicciones de distinto color político, sentarse a articular políticas, presupuesto y gestión: que mejor símbolo que quebrar ese mutismo, y que nuestros representantes hagan de manera conjunta una obra que reditua a todos.
La vivienda social, es otra deuda que tenemos para con buena parte de nuestra sociedad si se tratas de dar oportunidades, de incluir, de dignificar, un plan vivienda nacional, podría ser otra de las banderas: y en ese sentido, se ha hecho , pero desde la arquitectura, cabe pedir que los planes no sean grandes negociados para algunos, y que las casas que se hagan como parte de esta política sean resultado de un gran concurso nacional y no de algunos tableros conurbanos. Como cuesta soltar, no?
En términos arquitectónicos, bicentenarias son cantidades de obras que no se difunden nunca: infraestructuras y equipamientos indispensables, rutas, obras de generación de energía ( el otro día un amigo me contaba que se hicieron dos centrales, pero debieran ser mas: ergo: hablamos de las que se hicieron, de las que faltan , de todo?)
La ciudad construye en gran canal aliviador del Maldonado, nacion, en ciudad construye prolongaciones de subtes, de esos que la ciudad decía que iba a hacer : y si contamos las dos como buenas noticias en lugar de no contar ninguna?
Y si buenos aires asume que aun hoy es una de las diez ciudades mas grandes del mundo y deja de llorar sus miserias, intentando volver a pensar en esa medida?
Honrar a Thays con una muestra está bien, honrarlo continuando su obra y sus ideas es lo debido.
Si los que perdieron las elecciones en la FADU, se le presentan al futuro decano y se ponen a su disposición? Podrían con su orgullo?
no es una gran noticia que se estén construyendo la sede del conicet, y el centro del bicentenario (ex correo) ambas por concursos de arquitectura?
Bicentenario, o vil-centenario: a no perder una nueva oportunidad.
Bicentenario, o vil-centenario: a no perder una nueva oportunidad.
http://imagenhb.com/bicentenario_argentino/index.html
NUEVA IMAGEN BICENTENARIO, DISEÑADA POR IMAGEN HB, A CARGO DEL LIBRO DE AFRA
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