martes, 24 de marzo de 2015

a bancar la parada: SCA; CPAU; FADEA, CAPBA...a dar pelea!

Hoy aparece en los grandes medios, La Nación en este caso, una noticia que en un claro escenario coyuntural de pelea política y de intereses, puede afectar profundamente el ejercicio profesional, y los mecanismos de acceso al trabajo, sobre todo en la relación con la obra pública, como si todavía quedara algun margen mas para afectar esos vínculos...
detrás del planteo de que el gobierno nacional encara obras "faraónicas", de caracter "futurista" y que se las asignan a "monotributistas de la escala mas baja", se instala la idea de fraude , negociado, gastos sin contraprestación y uso de "perejiles", afectando lo que en principio se ha desarrollado en los términos mas deseables, deseados y reclamados por la matrícula que tiene ganas y vocación de pugnar y competir sanamente por el acceso al trabajo, la obra pública, y los proyectos para los que son formados miles de arquitectos en las universidades del país.

el sistema de concursos públicos, sigue siendo la herramienta mas democrática en ese sentido, y el libro que registra el centenario sistema de concursos hecho por la SCA da fe de la historia, riquísima historia , que ha permitido que talentosos profesionales de todas las épocas (los susodichos monotributistas que la nación pretende estigmatizar) puedan ocupar lugares significativos en la construcción del patrimonio construído de nuestra historia, mecanismo que en todo el mundo ha abierto esas oportunidades, tan celebradas y bienvenidas para alentar el crecimiento colectivo de las ideas que registran cada época.

por otro lado, se deja registro respecto al pago de un honorario de 1,58% del valor de la obra, lo que en principio, dada la magnitud del proyecto , parece razonable, entendiendo que representa al proyecto con toda la documentación, asesores, piezas de comunicación, y equipos que han llevado a cabo semejante encargo, información indispensable si se pretende licitar y llevar adelante el encargo seriamente.
la nacion se encarga de poner en boca de "un arquitecto que suele ganar las licitaciones" la idea de que no era necesario avanzar con todo el proyecto, que con el anteproyecto bastaba....
y ataca aquello que para nuestro gremio es tan deseable, como es el hecho de que los arquitectos cobremos los honorarios por nuestro trabajo, donde buena parte de ese trabajo (el 60% según los manuales que debieran reinstalrse como obligatorios) corresponde al proyecto, es decir, la construcción en el papel de toda la obra, previo a que la obra inicie.

Aprovecha La Nación para enfatizar sus diferencias con el gobierno a incluir en esta serie de "obras faraónicas" al centro cultural del bicentenario, próximo a finalizarse, una obra que se incorpora al patrimonio nacional también proveniente del sistema de concursos públicos, con una factura tan compleja como remarcable; con una vara bastante diferente, tan solo un mes atrás, el mismo diario muestra las bondades de la nueva filarmónica parisina de nouvel,
http://www.lanacion.com.ar/1766096-la-philharmonie-una-nueva-y-polemica-joya-en-el-paisaje-parisino 
fascinados porque si es allá es una joya, y si es aca, es afano....

La Nación se pierde la oportunidad de poner a la vista a los proyectistas, y contarnos ( no lo sabemos) si llegarán a ser unas grandes figuras referentes en las próximas décadas a partir de este proyecto, deslizando sospechas respecto a sus capacidades impositivas sin mucha mas información de la que parece surgir de un par de preguntas de un apurado llamado informativo con los profesionales.

La Nación se pierde también de hacer una o varias críticas serias posibles que tienen lugar, como siempre hay lugares cuando se encaran obras de semejante ambición, complejidad y trascendencia:
que implica esta nueva infraestructura para el sistema de comunicaciones nacional?
cual es su alcance y valor estratégico? era ese el mejor/único lugar para instalarla? porque ?
podría haberse cargando de sentido algún otro territorio mas necesitado en el interior del país instalando la antena allí? al igual que con el polo audiovisual?

todas esas y algunas otras, son preguntas válidas para hacerse en estas ocasiones, a la espera de que quienes han tomado las decisiones, nos brinden los argumentos que validaran tales elecciones.
esas eran preguntas pertinentes, segurmanente con enriquecedoras respuestas no solo del ministro de vido, sino de cantidad de funcionarios, técnicos y profesionales que forman parte de los cuadros técnicos que llevan adelante las políticas territoriales determinantes para los próximos años de nuestro país, de este y las posibles sucesivas gestiones de gobierno venideras.

pero no, lo que importa es la pelea per se, y no el sentido profundo de lo que se está proponiendo o llevando a cabo.

cabe esperar que orgánicamente la profesión, la matrícula, a través de sus representantes e instituciones, salga a fijar posición al respecto: el sistema de acceso a la obra pública a través de concursos abiertos; el monto de honorarios por las tareas profesionales. el valor del trabajo del arquitecto; la defensa gremial e institucional del trabajo de los colegas, y el descrédito y la penalización a los avivados de siempre que buscan llevar agua para sus molinos, en lo posible, buscando saltear y evitar los mecanismos participativos, o buscando establecer diferencias al momento de la elección de profesionales, disminuyendo a niveles vergonzosos la propuesta de honorarios a cobrar por debajo de límites inmorales. 

me gusta ver el ministerio de ciencia y técnica ya funcionando saliendo de un concurso de proyecto, en ese caso, a través de la FADU; el centro cultural del bicentenario, casi listo también, via concurso nacional de la SCA; los proyectos de las viviendas para los juegos olímpicos de la juventud, o el reciente gimnasio, también por concurso SCA, en estos casos del gobierno de la ciudad. y la torre. y tantos otros.

me gusta mucho mas ver proyectos que cobran vida así, y no por encargo directo, como vemos en cantidad de ocasiones de buenos, buenísimos o no tan buenos proyectos concretados en distintos puntos del país.
no hay duda que el acceso a la obra por concurso le da un valor agregado extra al encargo, la valida ante las instituciones, ante la cosa pública que lo financia, ante los colegas.

la discusión sobre la arquitectura que dan esos concursos, es la deuda pendiente, que el propio mecanismo en su dinámica, en su repetición, en su instalación definitiva como recurso, irá perfeccionando.

ojalá no se desaproveche esta ocasión para que nuestras instituciones, a través de sus autoridades, hagan entender hacia fuera (instituciones, organismos, prensa y público en general) el valor de los mecanismos de acceso al trabajo y validación de los profesionales a cargo de los proyectos; y que un funcionario o un periodista detrás de un interes extra, no pueda poner en tela de juicio un mecanismo que ya debiera estar validado.
y puertas adentro , que sirva también para elevar la discusión al respecto, concursos y premios, y el sentido y el valor de estos, la elección de jurados probos y calificados mas allá de pertenencias partidarias, y todos aquellos ajustes necesarios de incorporar para consolidar el valor de nuestro trabajo ante la sociedad para la que está destinado.

http://www.lanacion.com.ar/1778652-el-gobierno-lleva-pagados-ya-50-millones-por-una-torre-que-no-empezo-a-construirse